Fundición

La fundiación es una técnica versátil y económica que permite la producción de piezas de joyería con detalles finos y complejos.

Es una técnica en la que se derrite metal y se vierte en un molde para crear una forma específica. Esta técnica es muy común en la creación de joyas de oro y plata.

La fundición en joyería es un proceso de fabricación que implica la fusión de metales preciosos, como el oro, la plata o el platino, para crear piezas de joyería. En este proceso, se utiliza un horno especializado para calentar el metal hasta que se funda y se convierte en un estado líquido. Una vez que el metal está líquido, se vierte en un molde o matriz que tiene la forma deseada de la joya.

El molde puede ser de diferentes materiales, como yeso, silicona o metales especiales para soportar las altas temperaturas. Después de que el metal se enfría y solidifica en el molde, se retira del molde y se procede a realizar los acabados finales, como pulido y engaste de piedras preciosas si es necesario.

La fundición en joyería permite la producción de piezas complejas y detalladas, ya que el proceso de fundición permite capturar todos los detalles del diseño original en el molde. También es posible combinar diferentes metales en una sola pieza mediante el uso de la técnica de fundición, lo que proporciona un mayor nivel de versatilidad en el diseño de joyas.

Es importante destacar que la fundición en joyería requiere habilidades y conocimientos técnicos, ya que el control de la temperatura y la manipulación del metal fundido son aspectos críticos para obtener resultados precisos y de alta calidad.

Tipos de fundición en joyería

Herramientas básicas utilizadas en la fundición

  • Horno de fundición
  • Moldes
  • Crisoles
  • Pinzas de crisol
  • Lingotes o granallas de metal
  • Moldes de fundición
  • Rodillos y laminadoras
  • Espátulas y cinceles
  • Taladros y fresas
  • Lingotes y barras de grafito.
  • Equipos de seguridad

Materiales usados para la fundición en joyería

  • Oro
  • Plata
  • Platino
  • Paladio
  • Metales no ferrosos como cobre, bronce y latón.

Historia de la fundición

La historia de la fundición en la humanidad es muy antigua y fascinante. La fundición es una forma de metalurgia extractiva que consiste en calentar y reducir la mena mineral para obtener un metal puro, y separarlo de la ganga y otros posibles elementos.

La fundición de metales es una tecnología prehistórica, pero que aparece recientemente en los registros de la arqueología. Nació cuando los antiguos usaron las tecnologías del fuego, llamadas piro tecnologías, las cuales proveyeron las bases del desarrollo de la fundición.

Los primeros metales que se usaron fueron el oro, la plata y el cobre, ya que se encontraban en su estado natural o metálico. El oro se podía formar en piezas más grandes mediante el martilleo en frío, pero el cobre no. Por eso, alrededor del 7000 a. C., la gente del Neolítico comenzó a martillar cobre en hojas y cuchillos crudos. Los primeros artefactos de cobre conocidos se encontraron en Iraq y datan de 8700 a. C.

El siguiente paso fue descubrir que los metales como el cobre podían extraerse de su mineral calentando el metal más allá de su punto de fusión y que tales metales podían moldearse fundiéndolos y vertiéndolos en moldes. El primer metal que se fundió fue el cobre en el antiguo Medio Oriente. Los primeros artefactos conocidos que se formaron a través de la fusión y el moldeo son hachas de cobre de los Balcanes que datan del 4º milenio a. C. Para alcanzar las altas temperaturas requeridas para la fundición se inventaron los hornos con corrientes de aire forzado.

El siguiente descubrimiento crítico fue que la combinación de cobre y estaño hacía un metal superior: el bronce. Serbia usó cobre y estaño para fabricar objetos de bronce, marcando el comienzo de la Edad del Bronce. Se hicieron diferentes tipos de bronce para diferentes propósitos, y la tecnología de fundición se extendió, probablemente a través del comercio y la migración, desde el Medio Oriente hasta Egipto, Europa y China.

Otros metales que se fundieron fueron el plomo, la plata, el hierro y el zinc. Cada uno de ellos tuvo sus propios desafíos y aplicaciones. El hierro, por ejemplo, requirió temperaturas más altas y hornos más sofisticados que el bronce. El zinc fue difícil de fundir debido a su bajo punto de ebullición. La plata se obtuvo inicialmente como un subproducto de la fundición del plomo.

La fundición ha sido una actividad humana muy importante a lo largo de la historia, ya que ha permitido obtener metales para fabricar herramientas, armas, monedas, joyas, obras de arte y más. La fundición ha impulsado el desarrollo económico, social, cultural y tecnológico de las civilizaciones.

Sandra Sanchez

Sandra es una apasionada de la joyería y el diseño interior. Licenciada en diseño de interiores en la Universidad Taller 5 de Colombia, con varios cursos y postgrados en Barcelona y Madrid, España de Joyería. Compagina su trabajo como joyera y diseñadora de interiores con la docencia.